La portavoz de EAJ-PNV en el Senado, Estefanía Beltrán de Heredia, ha requerido al ministro Luis Planas que ponga fin a la incertidumbre en la que se encuentran los armadores vascos que faenan en aguas de Senegal ante el vencimiento del protocolo de pesca entre dicho país y la Unión Europea. La senadora jeltzale ha trasladado al responsable de Agricultura, Pesca y Alimentación la preocupación de los atuneros vascos que pescan a caña en esa zona de la costa oeste de África. “Viven con incertidumbre e indignación la desinformación a la que les tiene sumidos su ministerio. No saben si existen posibilidades de que se renueve el protocolo, y tampoco saben si se enfrentan a una parada temporal o definitiva, lo que abocaría a la flota a un cese definitivo de la actividad e incluso al desguace de los barcos”, ha señalado Beltrán de Heredia.

En virtud de este protocolo de pesca sostenible, la Unión Europea financia a Senegal con 1.700.000 euros cada año a cambio de que un determinado número de pesqueros de distintas artes puedan faenar en sus aguas, y para que lleven a cabo medidas de mejora del control de la pesca ilegal y desarrollen la investigación y la certificación sanitaria de los productos pesqueros. Sin embargo, la falta de control por parte de Senegal de la pesca ilegal ha llevado a la Comisión Europea a plantear la no renovación del protocolo, lo que obligaría a los atuneros caleros vascos que llevan más de dos décadas en Dakar a buscar otros caladeros o a abandonar definitivamente su la actividad pesquera. “Nos preocupa especialmente la situación de los atuneros vascos que pescan a caña con cebo vivo que solo encuentran en aguas senegalesas. Y, por tanto, si no pueden obtener la carnada tampoco pueden desplazarse a otras áreas como Mauritania o Cabo verde” a faenar.

Por ello, Beltrán de Heredia ha emplazado al ministro Planas a informar sobre la situación y previsión a futuro y, en su caso, si ha previsto ayudas compensatorias, aunque la respuesta del ministro no ha sido satisfactoria y tan solo ha aludido a que estos pesqueros “tienen que estar a la búsqueda de posibles nuevos caladeros”.