Rosa Peral ha trasladado al Ministro de Ciencia e Innovación la necesidad de  potenciar la innovación en las pequeñas y medianas empresas, muchas de las cuales no han podido seguir con su actividad durante el estado de alarma debido a unos niveles de digitalización bajos. “La conectividad masiva, la internet de las cosas, la inteligencia artificial, la robotización… implantadas en muchas otras empresas han permitido el teletrabajo administrativo y productivo en la industria y la continuidad de la actividad en esta etapa de confinamiento”, ha añadido la senadora de EAJ-PNV.

En la comparecencia de Pedro Duque en la Comisión de Ciencia e Innovación, la portavoz jeltzale ha extendido los beneficios que acarrearían estas mejoras a otros sectores como la justicia, la educación, la sanidad… “Servicios como la teleasistencia, la gestión digital de expedientes, la tele formación y la tan necesaria ciberseguridad siguen sin estar implantadas de forma masiva o no están disponibles para todas las personas. No hablamos solo de digitalización sino de transformación digital”. Por ello, ha constatado la necesidad de apoyar la I+D+i con el objetivo de poner en marcha las tecnologías “para evitar nuevos parones en lo económico, educativo, social… en los posibles nuevos brotes o futuras pandemias”. Peral ha añadido que ello contribuiría, además, a “mejorar la conciliación, reducir la circulación de vehículos o disminuir la contaminación y el ruido”.

Tras subrayar la importancia que Euskadi da a la I+D+i como palanca para el progreso de la sociedad y el aumento de la competitividad de las empresas, la senadora jeltzale ha trasladado a Pedro Duque la queja de que tanto en algunas convocatorias de ayudas del Ministerio “no se está teniendo en cuenta la especificidad de los centros tecnológicos vascos, por su dimensión ni por su composición, y no siempre son los criterios de excelencia científica los que se utilizan para la concesión de las ayudas”, le ha advertido a la vez que le ha conminado a reconsiderarlas.

Por otra parte, Peral ha constatado el papel clave de la Inteligencia Artificial en la lucha para anticipar el comportamiento del coronavirus y sus patrones de contagio. Sin embargo, ha lamentado que el mando único establecido por el Gobierno central ha traído como consecuencia una pérdida de tiempo a la hora de establecer unos criterios claros de recogida de los datos que tal herramienta requiere en las comunidades autónomas. “Voy más allá, la recogida de datos debería haber estado sistematizada de una forma clara y ambiciosa a nivel europeo e incluso mundial; datos de movimientos de personas, transportes, consumos y otras informaciones podrían ayudar a determinar las medidas más efectivas para el control del virus mediante la aplicación de IA”.

En este sentido, la senadora ha puesto en valor el proyecto piloto que se ha puesto en marcha en Vitoria-Gasteiz que busca detectar a través del análisis de las aguas residuales posibles rebrotes de COVID-19 antes de que empiecen a confirmarse nuevos casos. Coordinado por el Ayuntamiento de la capital alavesa, en la iniciativa están involucrados investigadores de la Facultad de Farmacia de la UPV-EHU, Osakidetza, el Instituto de Investigación Sanitaria Bioaraba y la Diputación de Araba.