El Grupo Parlamentario Vasco ha vuelto a requerir que el Gobierno del Estado reclame la celebración del referéndum del Sáhara Occidental. Al igual que hiciera el pasado año, la posición que España ocupará en diciembre en la presidencia del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ha motivado a EAJ-PNV a solicitar, a través de una moción ante la Comisión de Asuntos Exteriores, que fomente en la citada institución el pleno cumplimiento de la Misión de las Naciones Unidas para la celebración de la consulta que se estableció por la Resolución 690, en abril de 1991.

Cuarenta y un años después de los acuerdos firmados en Madrid, que han constituido una lacra para el pueblo saharaui, España tiene la oportunidad de asumir y liderar los compromisos que tiene pendientes. “Fue la potencia colonizadora de este territorio; la responsabilidad de culminar el proceso de descolonización recae directamente sobre ella, que continúa siendo la administradora del territorio”, ha opinado Jokin Bildarratz, portavoz jeltzale en la Comisión de Asuntos Exteriores.

Pese a la “ineficaz” política exterior llevada a cabo sobre este asunto por los diferentes gobiernos, el Estado español debe asumir “la responsabilidad política, histórica y moral” de los hechos, según Bildarratz. “Es necesario buscar una solución política justa, duradera y mutuamente aceptable, que prevea la libre determinación del pueblo del Sáhara Occidental en el marco de las disposiciones conformes a los principios y propósitos de la Carta de las Naciones Unidas; tal y como se recoge en la Resolución 2285 (2016) de 29 de abril de 2016 del Consejo de Seguridad”.

Bildarratz, ha reclamado al Estado que colabore en mejorar la situación de los derechos humanos tanto en el Sáhara Occidental como en los campamentos de Tinduf, y que incluya la competencia para su vigilancia y el respeto en la MINURSO para dar fin a las sistemáticas violaciones que se producen de los mismos. Asimismo, ha requerido a que muestre su repulsa por las expulsiones del personal político-civil de la Misión de las Naciones Unidas para el Referéndum del Sáhara Occidental, y que defienda su plena operatividad conforme a la resolución 2285 (2016), del Consejo de Seguridad. También ha reclamado al Estado que anime a las partes a cumplir con el acuerdo del alto al fuego firmado por el Frente Polisario y Marruecos, bajo el auspicio de las Naciones Unidas.

Una moción presentada en similares términos por EAJ-PNV en junio de 2015 fue rechazada por la mayoría del Grupo Popular, pese a contar con el apoyo del resto de Grupos Parlamentarios. Incluso algunos representantes del Grupo Popular, principalmente los canarios, declinaron ejercer su voto o se ausentaron de la sala, evidenciando un desacuerdo con la postura de su formación.