María Eugenia Iparragirre ha mostrado su rechazo a la propuesta de Ciudadanos para alcanzar un Pacto Nacional por la Educación al considerar que tiene un afán “unificador e igualatorio” que invadiría competencias propias de Euskadi, “y lo que de ello se deriva como consecuencia, en detrimento de la calidad de la Educación”.

La portavoz en la Comisión de Educación ha ratificado el desacuerdo jeltzale con la LOMCE, y ha enumerado sobrados motivos para dudar del acuerdo presentado por la formación ‘naranja’. “El término “nacional” en sí no es que nos preocupe; pero sí lo hace atendiendo a la trayectoria de Ciudadanos”, ha señalado Iparragirre: “Hablan de establecer la prevalencia de la legislación del Estado” sobre la de las Comunidades Autónomas, que han demostrado una mejor gestión en el ámbito educativo.

Por ese motivo, la senadora guipuzcoana ha resaltado el posicionamiento “centralizador" de Podemos que ha votado a favor de este “pacto nacional homogeneizador”, incluidos los senadores y senadoras que representan a los territorios históricos vascos, pese a que el portavoz de Educación, el guipuzcoano José Arrieta, había aludido en su alocución el respeto a las competencias.

Iparragirre ha estimado, asimismo, que este afán igualatorio perjudicaría la calidad de la educación en Euskadi. “Nos coloca en un escenario de regresión respecto al camino recorrido por la educación vasca, que ataca la calidad que ha alcanzado nuestro sistema vasco”. En este sentido, ha mostrado sus dudas por la falta de garantías al respeto de los derechos del Euskara como lengua oficial, a la vista del habitual proceder de Ciudadanos.