En esta ocasión se quiere ofrecer la celebración a todas aquellas personas que han adquirido el idioma por propia elección, a todas esas personas que han sido fundamentales en el avance del euskera. La sociedad vasca no se ha euskaldunizado `sin más ni más´ en los últimos años, sino que ha sido gracias al esfuerzo de tantas y tantas personas y agentes individuales y colectivos. Ez totalmente digno de mencion cada paso dado por  miles de ciudadanos y ciudadanas de cara a hacer suyo el euskera, la opción de todos ellos a favor del euskera. El avance conseguido  se lo debemos en gran medida a todos ellos y ellas, a  aquellas más de 300.000 personas que se han euskaldunizado en estos últimos treinta años en la Comunidad Autónoma Vasca y a todas aquellas personas que con ese mismo objetivo lo han hecho desde toda Euskal Herria. Se les debe mucho por lo que han aportado a la convivencia y a la cohesión social, por lo que han aportado en la vía hacia  el bilingüismo verdadero. La auténtica libertad lingüística ha de provenir de dominar ambas lenguas oficiales, de cuidar, proteger y promover aquello que es tan nuestro. Y han sido muchas y muchos los que han aportado aprendiendo lo que han podido desde aquellos tiempos trufados de dificultad y escasez, y que han dado a sus hijas e hijos, la posibilidad de unirse al mundo del euskera.

Hemos realizado un llamamiento a todas  las personas alderdikides a que adquieran un compromiso inequívoco a favor del euskera, para que continuemos sembrando la semilla de nuestra lengua, cada uno desde su ámbito y su espacio. No es posible el uso sin el conocimiento, pero una vez conocido es necesario utilizarlo. El euskera difícilmente podrá avanzar si  no es utilizado en cada ocasión de nuestra vida y nuestros actos, si cada uno de nosotras y nosotros no ponemos de nuestra parte para que se extienda a  todos los ámbitos de la vida. La característica más propia de nuestra identidad como pueblo necesita hablantes,  para crear una comunidad cada vez más extensa, plural y fuerte. Y, los nuevos euskaldunes,los `euskaldunberris´, tienen un quehacer muy importante en esa senda, el valor de su esfuerzo, un valor añadido. Un valor que merece el agradecimiento de toda la ciudadanía. Deberemos avanzar por ese mismo camino, para atraer a todas las personas de origen y creencias diversas a nuestro euskera y para afianzarlos en nuestra sociedad. Una gran masa de nuevos euskaldunes darán al euskera el sitio que merece entre nosotras y nosotros, porque  la misma lengua se vera enriquecida y fortalecida con hablantes  de diferente nivel y característica. Cara una de esas personas ganadas para el euskera abre nuevos horizontes y posibilidades a cada uno de los hablantes, posibilidades  fundamentales para superar los desequilibrios actuales.

La sociedad vasca  ha demostrado reiteradamente que quiere que el euskera esté al mismo nivel del resto de las lenguas, y reflejo de ese empeño es el trabajo realizado desde las instituciones democráticas. Los nuevos euskaldunes, los "euskaldunberris" han completado la labor realizada por las instituciones y el sistema educativo vasco, para conseguir revitalizar aquello que se encontraba en riesgo de ahogarse por tantas prohibiciones y persecuciones. El Día Internacional del Euskera no es nada que deba de pasar desapercibido, no es nada que haya de ser investido de vacuas reivindicaciones. Es un día para reiterar lo que fuimos y lo que somos, lo que nos hace euskaldunes y, sobre todo, un día para adquirir compromisos firmes. El euskera necesita de todos y cada uno de nosotras y nosotros, ha de ser llevado en el corazón, si, pero sobre todo utilizado en el quehacer diario, tal y como han venido haciendo tantos y tantos euskaldunberris durante tanto tiempo.