Esta apreciación la ha realizado en el debate sobre los Presupuestos Generales del Estado para 2015, sobre los que el Grupo Vasco ha presentado un veto, motivado principalmente por el nulo compromiso con Euskadi en relación a las inversiones y por la ineficacia que presenta en medidas de reactivación económica.

El senador jeltzale ha lamentado la falta de compromiso de las cuentas presentadas con el País Vasco, con un 0% en nuevas inversiones y un 0,5% del total inversiones directas reales en el Estado, lo que, en su opinión, sería suficiente motivo por sí solo para la presentación del veto. Esta falta de compromiso se refleja en la ausencia de atención y soluciones del Gobierno español a problemas como el del tren de alta velocidad, donde incumple sus promesas y prioriza otras comunidades por intereses electorales dejando de lado Euskadi y siguiendo sin completar el eje atlántico. También se ve esa desafección con las variaciones legales que afectan negativamente a las Entidades de Previsión Social Voluntaria o con la no participación en los acuerdos sobre el aeropuerto de Foronda, incluido el de que tenga una capacidad operativa de 24 horas, alcanzados por el Gobierno Vasco, Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz, la Diputación de Álava y la Cámara de Comercio e Industria de Álava.

Asimismo, el rechazo y solicitud de devolución al Gobierno del proyecto de Presupuestos Generales del Estado se ha basado también en la falta de medidas apropiadas para lograr el estímulo económico que permita reactivar la economía real. Bildarratz ha criticado el empeño en poner el déficit cero como objetivo único cuando hay más de 5 millones de personas en exclusión social y el 25% de la ciudadanía no encuentra empleo. Pese a ello, no hay medidas de envergadura para tener incidencia en los problemas sociales.

Bildarratz ha ironizado con los dos mundos que se vislumbran en el panorama español: por una parte, el de la España que vive dentro de la economía financiera, donde el dinero “parece que entre por todas partes”, según el Gobierno estatal, y la España en la que las Pymes no pueden acceder al crédito. Pese a tratarse de las empresas que más empleo generan, el endurecimiento de las condiciones de los bancos para ofrecer crédito ha hecho que la financiación a pymes haya caído un 66% entre 2007 y 2013, además de ser más caros. En opinión del portavoz jeltzale, difícilmente se va a reducir de modo significativo la tasa de desempleo si no se soluciona la sequía de crédito. Finalmente, el senador ha aludido a la necesidad de llegar a un gran acuerdo entre los distintos partidos para generar la confianza que se necesita para lograr un mayor crecimiento.